Cepillarse correctamente y visitar al dentista de manera regular es fundamental para mantener una boca sana, pero una buena alimentación es igual de importante para prevenir problemas dentales. Te contamos la relación entre alimentación y salud bucodental y cómo podemos mejorar nuestra sonrisa a través de la dieta.
Alimentos azucarados: riesgo de caries
A este viejo enemigo seguro que lo conoces. El azúcar es un festín para las bacterias presentes en la boca. Dichas bacterias se alimentan de los azúcares, generando ácidos que atacan y desmineralizan el esmalte.
Como ya sabes, el esmalte es la capa externa de los dientes, la que los protege, y no se regenera de manera natural. Esto significa que si no controlamos el consumo de azúcar y no tenemos una higiene dental adecuada, las caries pueden avanzar rápidamente dando lugar a problemas más graves.
- Consejo: para prevenir las caries, limita los alimentos ricos en azúcares y carbohidratos refinados. Opta por snacks saludables como frutas frescas o frutos secos, menos perjudiciales para tus dientes.
Erosión dental: cuidado con las bebidas ácidas
¿Qué son las bebidas ácidas? Son los refrescos carbonatados, los zumos de frutas, el vino, las bebidas energéticas… Todas ellas pueden desgastar el esmalte con el tiempo.
Cuando se produce esa erosión, aparece la sensibilidad dental, un mayor riesgo de caries y los dientes se vuelven más amarillentos. Esto ocurre porque los ácidos de estas bebidas actúan directamente sobre el esmalte, desmineralizándolo.
Como ya sabes, la pérdida de esmalte es irreversible, así que tus dientes quedarán expuestos y vulnerables a las bacterias.
- Consejo: si no te resistes a consumir una de estas bebidas, hazlo con pajita para evitar el contacto directo con los dientes. Recuerda no cepillarte los dientes inmediatamente después de consumirlas, pues el esmalte está más vulnerable y puede desgastarse todavía más.
Enfermedades de las encías: relacionadas con una dieta rica en azúcares y grasas
Una dieta de este tipo afecta a los dientes pero también a las encías. La acumulación de placa bacteriana provoca inflamación y sangrado de encías, es decir, gingivitis. Cuando la gingivitis no se trata, evoluciona a una enfermedad periodontal más grave que conocemos como periodontitis, que puede hacer que pierdas tus dientes.
Los alimentos ricos en grasas saturadas y azúcares refinados favorece el crecimiento de bacterias dañinas que debilitan tu sistema inmune, haciendo que tu cuerpo no pueda combatir la infección en las encías.
- Consejo: basa tu dieta en antioxidantes, fibra, etc. Una dieta equilibrada fortalece el sistema inmunológico y contribuye a una mejor salud general, pero también de tu boca.
Soluciones para cuidar tu dientes
Si alimentación y salud bucodental están relacionadas significa que también hay una parte positiva entre tantas afecciones. Algunos alimentos fortalecen los dientes y masticar nos hace producir saliva, imprescindible para limpiar nuestra cavidad bucal.
1.- Fortalece tus dientes
- El calcio es un mineral fundamental para fortalecer los dientes y los huesos.
- La vitamina D es fundamental también para que el cuerpo pueda absorber correctamente el calcio.
- Consume alimentos ricos en calcio como lácteos, vegetales de hojas verdes y pescados grasos para mantener tus dientes fuertes y sanos.
- Consume huevos, productos fortificados y pescados grasos para que su vitamina D ayude en la prevención de la desmineralización dental.
2.- Mantén tu boca bien hidratada
- La saliva actúa como lubricante, neutraliza los ácidos, protege contra las bacterias y facilita la remineralización del esmalte. Una dieta adecuada estimula su producción y mantiene la boca limpia y protegida.
- Beber suficiente agua durante el día es clave para mantener un buen nivel de hidratación, pero también puede ayudar consumir alimentos como quesos, nueces o verduras crujientes.
3.- Evita el mal aliento
- Obviamente, si comemos platos que lleven cebolla, ajo o ciertos tipos de queso, nuestro aliento será más fuerte.
- Sin embargo, cambiar su olor de manera natural requiere consumir alimentos ricos en fibra como frutas y verduras crujientes. Con estos alimentos limpiamos los dientes de manera natural y estimulamos la producción de saliva.
- Además, hierbas como el perejil o el hinojo tienen propiedades refrescantes que pueden mejorar el aliento.
Como ves, la alimentación y la salud bucodental están íntimamente relacionadas, además de lo importante que es una dieta equilibrada para todas las funciones de nuestro cuerpo, incluida una sonrisa sana.